8 de octubre de 2014

DIVINA RUTINA

Hay quien piensa que la rutina es síntoma de dejadez, aburrimiento y desidia. Yo en realidad creo que la rutina, si bien aplicada y controlada, puede ser una maravillosa manera de establecer unas pautas en nuestro día a día que nos aporten bienestar, equilibrio y seguridad.

Por rutina entiendo esos actos que acostumbramos a realizar de manera inconscientemente consciente a lo largo del día.

Aunque son muchos más, he seleccionado cinco de los muchísimos actos que aunque realizados de manera sistemática, forman parte de una rutina que adoro y que me aporta equilibrio; tanto físico como mental. 

El único riesgo es controlar las posibles molestias que el no cumplir, con alguno de estos "rituales" puede conllevar. Pero a mi modo de ver, esos imprevistos y cambios de planes inesperados, son los aliados perfectos para mantenerse alejado de la línea que marca el comienzo de la dependencia.

¡Vamos allá!

1- Desayunar cereales. 

A mí me encanta viajar. Descubrir nuevos países y culturas, descifrar nuevos idiomas y conocer gente es algo que me chifla. Sin embargo, dependiendo del país y la cultura, el tema comida suele ser uno de los gaps que más me cuesta superar. 
Leo, que tiene un estómago a prueba de bombas y de tamaño XXL (aunque al verle nadie lo diría) tiende a probarlo todo, tenga la pinta y la forma que tenga, y sea la hora que sea. Yo no. Por eso cuando en Camboya nos daban sopa de pollo con arroz para desayunar, y en Japón sopa de miso y pescado seco, yo siempre emitía un discreto: "No, thank you". 
Puedo desayunar perfectamente un té con un croissant, o con pan y mermelada; pero sí antes no he comido mi pequeña, y rutinaria, ración de cereales con yogurt, seguro que antes de la hora de la comida tendré hambre, y esto sólo puede tener dos consecuencias, negativas en ambos casos: a)picaré algo para matar el gusanillo y eso hará que llegue a la hora de comer sin hambre; b)si, por le motivo que sea, no puedo picar nada, tendré que aguantar el dolor de barriga, y la desconcentración, que me causará el hambre. 




2- Beber mucha agua.

Aunque todo el mundo, o mejor dicho, todas las modelos y VIPS acostumbran a cuantificar la cantidad de agua que beben, yo prefiero dejarme de cálculos y asegurarme de que sea mucha. Desde que me regalaron mi querida y adorada Bkr doy vueltas por la casa, y fuera de casa, siempre con ella. Teniendo en cuenta que la mía es de 500 ml y que la relleno unas 4 veces al día (comidas a parte), es fácil hacer cálculos. Pero insisto en que lo importante no es tanto la cantidad, sino el hecho de tener la costumbre de beber agua durante el día. El motivo no debe ser sólo eliminar líquidos y adelgazar, que también va bien; el motivo principal debe ser el bienestar que aporta sentir el buen funcionamiento de los órganos internos, la mejora del aspecto de la piel; el hecho que beber tanta agua probablemente ayude a reducir el consumo de otras bebidas industriales o más azucaradas. 
Yo cuando estoy fuera de casa varios días, es de las cosas que hecho más en falta, y es que reconozco que, cuando rompo la rutina, por desgracia, de todas mis divinas costumbres, esta es la que se ve más afectada.




3- Cuidarme la piel. 

Confieso que, si este blog hubiese empezado a escribirlo hace cinco años, este punto no formaría parte de la lista. Pero por suerte o por desgracia, la edad va dejándose notar, una toma conciencia, lee, se documenta y se da cuenta de que beber agua no lo es todo y que también hay que ayudar a la piel a aguantar el ritmo.
Lo de lavarnos la cara con jabón por la noche, después de habernos desmaquillado supongo, y espero, que sea algo que hacemos todas de manera bastante natural (aunque sea un desmaquillantes sin enjuague, yo acostumbro a enjuagar y limpiar lo mismo).
El lavado matutino era el que yo no acostumbraba a hacer. Mis argumentos eran no haber salido, haber estado durmiendo, que no me había dado el aire, ni la contaminación, que no iba maquillada y que me había lavado antes de acostarme.¿Os suenan? Pues no, no valen. Cuando leí y me documenté al respecto, los motivos que animaban a hacerlo también antes de prepararse para salir, eran tanto o más válidos que los míos para no hacerlo. No os voy a aburrir con todos ellos pero os dejo sólo el que a mí más me convenció. Antes de acostarnos nos lavamos y ponemos una crema nutritiva, que junto al sudor que desprendemos mientras dormimos y las células muertas que obviamente seguimos produciendo, incluso a mayor velocidad mientras dormimos, crean una especie de capita que si no se retira por la mañana, se va acumulando dando lugar a imperfecciones como los puntos negros, las manchas o las erupciones. En cuanto me imaginé esa "capita" en mi cara tuve escalofríos, y desde ese día no he dejado de hacerlo ni una sola vez.

Lo mismo podéis aplicarlo al cuerpo y la necesidad de hacer scrub almenos una vez por semana y usar un guante de crin el resto de días. 






4- Antes muerta que sencilla.

En realidad exagero, pero el título de la canción me venía genial.
Algunas de mis amigas se rien y me toman el pelo porque dicen que siempre estoy arreglada como si fuera o viniera de algún sitio, aunque haya estado en casa todo el día. 
Lo podéis llamar vanidad o presumir. En realidad supongo que es un poquito de las dos cosas, pero lo importante es que siempre lo he hecho, y espero seguir haciéndolo, por mí. Recuerdo que poco antes de que naciese Lucas varias personas, pero sobretodo mi madre, de la que he heredado este sentido del gustar pero sobretodo del gustarse a una misma; solía decirme que con el bebé no tenía que dejarme, que nada de pasarse el día entero en pijama, que tenía que sacar aunque sólo fuesen diez minutos al día para asearme y arreglarme, de manera que al mirarme al espejo me gustase lo que viese; que eso iba a influir en mi estado anímico y mi buen humor. Y como en otras tantas ocasiones, tenía razón. 
No soy contraria a los pijamas, ni a los chandals; pero me gustan para dormir y para hacer deporte respectivamente. Para estar por casa prefiero unos tejanos viejos y dados, y una camiseta que ya no uso para salir. 






5- Cuidar a los que me cuidan.

No por ser la última es la menos importante de mis costumbres diarias; más bien al contrario. Ninguna de las anteriores tendría sentido si no existiese la bonita costumbre de cuida y mimar a los que nos dan cariño y mimos de manera incondicional.
En mi casa siempre ha sido costumbre desearse buena suerte al salir de casa para ir a trabajar, y recuerdo que cuando empecé a salir con Leo a él le sorprendía cuando yo le deseaba buena suerte al salir por la puerta. Sin embargo a día de hoy es algo que ambos hacemos de manera rutinaria y necesaria. Tan necesario como preguntar qué tal ha ido el día al final de la jornada y escuchar lo que el otro tiene que contar, tan necesario como darse un abrazo porque sí al cruzarse en la cocina mientras uno pone el lavaplatos y el otro prepara el biberón y tan necesario como no irse a dormir sin decir te quiero.
Y lo mismo es aplicable a família y amigos. Dedicar un poco de tiempo a preguntar a la gente por cosas que son importantes para ellos y que por lo tanto lo son para tí, es una manera de cultivar el alma y llenarse de energía positiva, completamente gratis, increíblemente fácil y totalmente necesaria.






¡Viva la divina rutina!






4 comentarios:

  1. ¡Hola Moon! Bonita entrada. ¡Preciosas fotos! Da gusto verte por ahí ;) Comparto tu idea de rutina y los puntos dos y cinco forman parte de la mía, pero la de los cereales por la mañana la cambio por una cervecita antes de cenar :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lalla, bombón! A ver cuando nos la tomamos juntas esa cervecita ;)

      Eliminar
  2. Anónimo10/09/2014

    dos clases de rutina.
    La que hacemos inconsciente diariamente como autómatas todos :sí o sí.
    La rutina consciente.
    disciplina, esfuerzo, tenacidad ,en difinitiva ,autocontrol hacer las cosas que nos aportan bienestar en el crecimiento personal diario q nos hacen sentirnos mejor y más realizados.
    Yo utilizó las dos, pero me identifrico más con la segunda, por ser yo la controladora de mis actos .

    Viva!!! las reflexiones queu nos hacen pensar cómo actuamos a veces sin darnos cuenta.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo importante, como tú bien dices, es hacer todo aquello que nos aporta bienestar.
      Me alegro de que te haya gustado el post!

      Eliminar